Imagen tomada de http://www.mujerescontodaslasletras.com/el-libro/
Juan Sebastián López, Mayra García y Jenny Marcela Rodríguez
Nuestro rollo*
Mabel y Andrea González Pacheco, son hermanas y co-fundadoras de Nuestro Flow, empresa social dedicada a crear proyectos para promover la diversidad cultural y la equidad de género. Entre ellos El Negro Está De Moda y Mujeres con todas las letras libro que publican de la mano de la editorial Planeta.El pasado 12 de marzo, junto a Nuestro Rollo (programa radial del semillero Mareiwa ), tuvimos la oportunidad de conversar con Mabel González Pacheco, cofundadora y directora general de Nuestro Flow y parte del equipo de Mujeres con todas las letras. Esta es la entrevista completa** que tambien pueden escuchar a través de Escenario radio
Nuestro Rollo: Eres una abogada, con cercanías al tema económico ¿Cómo terminas en creando de Nuestro Flow y los demás espacios que han venido construyendo como Mujeres con todas las letras?
Mabel González: Mujeres con todas las letras es el resultado de varios años de trabajo. Cuando yo era niña fui actriz, tomé clases de teatro, de danza, soñaba con dedicarme a esto, pero en el camino me encontré con el derecho, mis papás son abogados, me encontré con todo el tema de derechos humanos, me interesaba mucho contribuir, aportar a los problemas sociales que yo empecé a conocer cuando era niña, sobretodo en un país como Colombia y en un continente como Latinoamérica que tiene tantos desafíos en materias de igualdad e inclusión social, entonces yo creo que Mujeres con toda las letras es simplemente una búsqueda y un retorno a esos intereses que siempre he tenido, al margen de que he trabajado en el sector económico, ahorita vivo en Canadá trabajo en temas de desarrollo sostenible con inversores, con el sector financiero, siempre ha habido un interés muy grande por contribuir, por aportar a mejorar las condiciones de la sociedad y Mujeres con todas las letras busca eso, contribuir un poquito más a la igualdad de género, a la diversidad. Por otro lado Nuestro Flow fue creado como una plataforma de proyectos que busca promover la igualdad y la diversidad y tenemos varias iniciativas entre ellas Mujeres con todas las letras que es este libro que acabamos de publicar con Editorial Planeta. Estamos muy contentos por la recepción del proyecto aquí en Colombia, Perú, Ecuador; el libro ha gustado mucho, lo cual nos alegra mucho el corazón, el saber que los niños y adultos ven en este libro una posibilidad de descubrir el universo femenino de centro y suramérica, una tarea que nos parece que estaba pendiente y que por supuesto que no vamos a poder resolver con un solo libro, esto es apenas un abrebocas, una ventanita, una invitación para descubrir ese universo femenino, pero que nos parece muy importante para lograr avanzar en él lograr construir sociedad más justa e igualitaria.
NR: Claro y es que, las felicitamos y les agradecemos, porque realmente es un aporte muy bello a justamente al conocimiento. Creemos que Mujeres con todas las letras, 28 letras, 28 mujeres, es un pedazo muy pequeño de lo que hay que saber, pero también es un aporte muy grande para esta revolución que arrancas conduciéndonos.
MG: Sí, éste proyecto empezó hace cuatro años, y había muy poco en esa materia, ahorita estoy muy contenta de ver que las iniciativas pululan por todos lados, sobre todo en nuestros países, yo vivo en Canadá y pues puedo ver que de todas maneras allá tienen unos años de avance frente a estos temas de género, entonces hay muchas iniciativas que quieren visibilizar ese aporte femenino, porque si no empezamos por conocer qué hemos hecho, pues no podemos tampoco avanzar a partir de ahí. Claro 28 mujeres es nada, es limitado, es apenas una invitación a llamar la curiosidad, esperamos que esto sea una pequeña puerta a ese universo que está lleno de mujeres de diferentes formas, colores, sabores, porque parte de la selección que tratamos de hacer fue eso, no hay un solo modelo de mujer, no somos mujeres perfectas de pronto habrá algunas, yo no he conocido ninguna hasta la fecha, pero es eso, la diversidad de ese universo femenino lo que nos hace ser capaces de tener una sociedad y de ser capaces de construir una sociedad rica en todos los sentidos. Entonces Mujeres con todas las letras es eso. Yo aprendí muchísimo en este ejercicio, si tu buscas por ejemplo en google, mujeres notables, vas a ver que aparece cero resultados, y uno dice ¿será que no hay? y cuando empiezas a buscar te das cuenta de que no hay una sino un montón. Nuestro proyecto quiere ir más allá y queremos seguir contribuyendo a documentar a todas esas mujeres para ponerlas a disposición de niñas y niños.
NR: Vives en Canadá, y que igual muchas de las mujeres que participan en este proyecto igualmente tienen una experiencia fuera del país. hace poco pasó el día de la mujer y lo que notábamos era que se compartían los mismos mensajes un poco tópicos, y esto digamos contrastaba con las protestas, con las manifestaciones de ese día y entonces nos hacía pensar una cuestión y es que quizá es necesario, de alguna manera ampliar el horizonte cultural para entender y sensibilizarse; como tu bien decías, frente a estos temas, el del universo femenino de centro y Suramérica porque especialmente aquí, en Colombia, la cuestión parece ser bastante complicada. Entonces, ¿qué papel crees que juega el hecho de viajar en la conformación de una sensibilidad diferente frente al hecho de ser mujer y el papel que juega la mujer en el mundo actual?
MG: Digamos que, en mi caso personal llevo 20 años yendo y viniendo, tuve la oportuna de irme a estudiar joven y yo creo que desde la primera vez que salí que fue a Cuba a estudiar cine, me di cuenta que había mucho de aprender afuera. Pero siempre quise volver, hay una cosa que es más fuerte que yo que me llama a querer contribuir de diferentes maneras a lo que pasa en Colombia porque finalmente yo soy de este país. Estoy muy contenta de vivir en Canadá es una sociedad maravillosa y de la cual aprendo mucho, en temas de género hay una legislación alrededor, los discursos feministas, son mucho más avanzados, no hay la polarización de si ser feminista es bueno o no, allá es claro que el feminismo es la lucha por la igualdad, acá una cosa es de izquierda o de derecha; religión mezclada en medio de todo eso, entonces yo creo que el hecho de viajar nos confronta con lo que somos y nos hace ver que hay maneras, hay soluciones de mejorar las cosas, que no es solamente lo que vemos sino que podemos aprender de cómo otras sociedades se han equivocado y también como otras sociedades han construido consensos a través de los cuales han avanzado. El hecho de que el equipo esté en diferentes lados yo creo que es un resultado de eso, Quienes hemos vivido afuera hemos aprendido de esa sociedad que nos acogido y hemos tratado de recoger las lecciones que nos parecen oportunas para poder traer aquí cómo podemos aprender de esas experiencias y cómo podemos aportar a partir de ello, creo que de eso se trata. de Ver los errores y también las cosas positivas que han sucedido allá porque estamos años luz en muchos terrenos, uno de ellos es el terreno de la igualdad de género. Yo creo que podemos avanzar más rápido si logramos escuchar y ver y aprender de esas experiencias o por supuesto adaptadas a nuestra realidad podemos avanzar mucho más rápido y no tenemos que tardarnos 50 años para lograr conquistar derechos para las mujeres como pasaban antes. ahorita las cosas van mucho más rápido, las redes sociales ayudan mucho y eso es lo que trata de hacer Mujeres con todas las letras.
NR: Mabel encontramos que Nuestro Flow apoya o gesta El negro está de moda, entonces quisiera que nos contaras un poco qué es
MG: Así nació Nuestro Flow de hecho, fue creado por mi hermana y por mí, mi hermana vive acá, en Colombia y desde hace años queríamos trabajar juntas pero siempre estábamos lejos y no había la oportunidad de hacer algo en donde nos apoyáramos. Hasta que nos dimos cuenta que compartimos intereses muy similares pero nunca habíamos hablado de eso. Entonces decidimos lanzarnos con Nuestro Flow y el primer proyecto fue El negro está de moda, este empezó como una campaña para invitar a la gente a reflexionar sobre el impacto de nuestro lenguaje, entonces nosotras nos preguntábamos cómo es posible que todavía sea normal frases como “trabajo como negro para vivir como blanco”, y todas estas series de expresiones como “me voy a robar un esfero”, que tienen unas implicaciones que son muy importantes y cuando uno se convierte en mamá, se pasa por unos procesos importantes que dicen “yo tengo que enseñarle a mi hija lo mejor”. Yo recuerdo que mi hija una vez me preguntó ¿por qué te vas a robar un esfero? entonces me quedé sorprendida que ella si estaba literalmente entendiendo ese mensaje, no era lo que yo quería decir, pero para ella era claro que yo si me quería robar un esfero. Entonces empezamos a trabajar al respecto del lenguaje, mi hermana venía de terminar una investigación con todo el tema de poblaciones afro y mujeres afro que se desplazan a Bogotá y que son víctimas de la violencia pasiva y activa y de la discriminación y nos decidimos lanzar a invitar a nuestros amigos, a nuestra familia, invitarlos a reflexionar el impacto del uso de sus palabras o nuestras palabras podrían tener en los otros. a partir de ahí comenzamos a crear campañas, la gente se empezó a unir, empezamos a ver que la gente quería aprender de todo el mundo afro, colombianos, bogotanos, que nosotros venimos de allá, es una sociedad multicultural, diversa y no sabemos mucho de la comunidad afro tampoco, entonces empezamos a generar contenidos siempre con una apuesta muy visual, hemos trabajado con diferentes colaboradores porque el tema no es nuestro fuerte, que los ayude a plasmar visualmente a lo que queremos, porqué queremos acercarlo de una manera, “cool”, entonces no queremos nada acartonado sino al contrario, de qué manera podemos hacerles fácil entrar a ese universo, queremos es facilitar el asunto y ahí nació Candelaria, ella es una niña que viene de Quibdó y que llega a Bogotá desplazada y por primera vez se da cuenta que es distinta a los demás porque ella en Quibdó no es distinta a nadie, en cambio en Bogotá la miran diferente, que le miran su afro en el bus y la gente la mira como con curiosidad, con rechazo, y ella decide que en vez que achantarse va a convertir eso en superpoderes y que va a utilizar esas diferencias para mostrarle al mundo lo poderosa que ella es. Y ahorita estamos por lanzar la Liga de la diversidad, que son cinco niños, un niño por cada etnia que habita en Bogotá, entonces tenemos una niña que es de las comunidades Rom, Jacinto es palenquero, bueno de las cinco comunidades que habitan en Bogotá y que busca justamente a invitar a la gente a descubrir las maravillas y las fortalezas de esas comunidades que hacen parte de nuestra riqueza cultural. Yo creo que cuando la discriminación y todas esas cosas que suceden tienen que ver con esa ignorancia a lo desconocido. Cuando no conocemos algo le tenemos miedo y tratamos de rechazarlo, lo que buscamos nosotros es acercarnos a eso, que no hay que tener miedo, que al contrario, es maravilloso, que si lo aprendemos a conocer vamos a aprender a trabajar en equipo de la mejor manera.
NR: Y también hay implícito el tema de la sostenibilidad, tienen una lista negra de mujeres que justamente trabajan y tienen como una cuestión económica también ellas con sus productos que también es muy importante que conozcamos y que naturalmente apoyemos estas iniciativas para estas mujeres directamente y pues estos puentes que dan. Volviendo a Mujeres con todas las letras, ¿con cuál de las 28 mujeres te sentiste identificada?
MGl: Yo aprendí muchísimo porque la mayoría no las conocía, por ejemplo Prudencia Ayala que es del Salvador me encanta. Una mujer indígena muy pobre, de una familia con muy pocos recursos que se lanza a la presidencia del salvador cuando ni siquiera las mujeres tenían derecho al voto. Y ella lo sabía, entonces es como ir más allá de lo que cualquiera pudiera hacer y decir no me importa aunque no podamos votar yo voy a ser presidenta. Y aunque su elección no fue tenida en cuenta porque ella no tenía ese derecho si abrió la posibilidad a que se organizaron las mujeres y a que años después se les diera derecho al voto y más adelante la posibilidad de participar en las elecciones. Entonces Prudencia estuvo en la cárcel varias veces, además fue escritora, entonces yo digo estas mujeres maravillosas que a qué hora hicieron todo eso, a veces uno siente que la vida va más rápido que uno y que uno no tiene energía para hacer todas las cosas, entonces imagínense en esas condiciones hace varias décadas con una pobreza económica absoluta y a pesar de eso ser capaz de ir más allá y de inspirar a tantas mujeres después es como algo increíble. Prudencia me encanta, también la de la N, porque el tema del cambio climático es un tema que me interesa mucho, también personalmente, entonces Ngreikamoro de Kayapó que está viva aun y que es líder de su comunidad y que trabaja por proteger la selva amazónica es una de las historias que más me gusta y más me inspira.
NR: Valoramos muchísimo que no solo sea un rescate, una visibilización de lo femenino, de las diferentes formas de ser mujer, de, como se ha comportado este tema en Latinoamérica, pero nos parece muy importante el tema de la divulgación, porque generalmente vemos estos temas en espacios académicos, los vemos en artículos libros, en unos lenguajes que no son para todos y todas. Entonces, ese trabajo nos parece un material para que cualquier persona entienda. ¿Ustedes esperaban que este libro, aunque es catalogado como literatura infantil, tuviera tan buen eco en públicos de todas las edades?
MG: Nosotros honestamente, desde que empezamos yo decía “esto lo vamos a hacer bien y yo estoy segura de que a todo el mundo le va a gustar”. Fue una convicción nuestra desde que nació la idea, de hacerlo lo mejor posible, por eso buscamos una ilustradora maravillosa, pues dos ilustradores, Paola y Alejandro, nos tomamos el tiempo para encontrar a cada una de las personas que hizo parte del equipo, porque queríamos hacer algo muy lindo que atrajera a mucha gente. Yo creo que la convicción sería que siempre soñé con eso. Ahora, las cosas no son tan fáciles, por ejemplo yo nunca pensé que Planeta se fuera a acercar a nosotras, a decirnos que querían publicar el libro. Yo pensé que me iba a tocar a mi ir con el libro y decir por favor ayúdenme a publicarlo. Entonces eso si me sorprendió, que vinieran ellos a buscarnos. Ayer en uno de los noticieros de Perú salió catalogado el libro al lado del de Michelle Obama como los dos recomendados. Ese tipo de cosas nos han sorprendido gratamente, nos alegra mucho que la gente nos está viendo. Que haya llegado sin hacer mayor esfuerzo aunque hemos trabajado muy duro para esto. Que esté en Ecuador, que la gente esté hablando de él en Montreal, que nos escriban de Londres preguntando cómo lo consiguen en inglés; de Alemania, eso nos ha sorprendido enormemente, pero sabemos que es un producto que hemos hecho con mucho cuidado con mucho amor. Entonces en ese sentido, debería pasar así, entonces no nos sorprende en el sentido que lo hemos cuidado mucho pero agradecemos que a pocos días del lanzamiento la gente esté hablando del libro y que ojalá sirva para inspirar a más gente a continuar con el trabajo.
NR: Pues a nosotros nos ha inspirado. Creo que hablo por todo el equipo de Nuestro Rollo y por todos los que nos escuchan y nos leen. Cuenta con nosotros para todos los proyectos. Nosotros también tenemos una línea de interés común. Estamos con proyectos sobre el tema de mujeres, y creo que debemos empezar a buscar y unir, articulaciones de trabajos en redes. A veces uno siente que está solo y está como aislado, nada mejor que romper fronteras.
MG: No hemos avanzado solas, trabajando en equipo es más fácil.
Juan Sebastián López, Mayra García y Jenny Marcela Rodríguez
Nuestro rollo*
Se ha adaptado y ajustado la entrevista radial para esta publicación**
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ARTE-FACTO. Revista de Estudiantes de Humanidades
ISSN 2619-421X (en línea) abril de 2019 No. 10